Maxi partió de su San Francisco natal hacia Dinamarca para iniciar otra etapa de su vida tras haber desempeñado la tarea de PF en el plantel profesional de nuestra institución.

Surgió la posibilidad de estar en Qatar alentando a la selección y no lo dudó, se tomó un vuelo y en cada partido de Argentina está en la tribuna con su camiseta de Sportivo Belgrano, sentido de pertenencia que inculcó su familia desde niño.

El Departamento de Prensa dialogó con él, que desde Doha, y con la hinchada cantando de fondo, dijo "llegué el día del partido contra Australia, en ese momento no podía describir como me sentía, eran muchas cosas las que me estaban pasando, el hecho de que es mi primer mundial y pude llegar hasta acá con mi propio esfuerzo, una mezcla de ansiedad y nervios que recién pude desahogar cuando terminó el partido y me tocó tener a los jugadores cantando y festejando junto con toda la hinchada" además agregó "es muy confortable el cariño que uno encuentra al compartir momentos con más gente de Argentina, a la noche comemos asado todos juntos y estamos constantemente hablando de fútbol".

Maxi contó por qué asiste a los partidos con la casaca de la verde "en parte es por cábala, porque cuando la usé en Londres la selección ganó y por otro lado, me gusta mucho poder llevar a todos lados los colores de mi club, del lugar del cual vengo. Es muy lindo cuando en la cancha te preguntan de qué equipo es la camiseta y ahí mismo poder entablar una conversación y vínculo con alguien que antes no conocías". 

El sanfrancisqueño admitió extrañar la ciudad, el club, su familia y amigos, pero aún así reflexionó que "todos los que nos vamos del país o nos alejamos de los nuestros, sabemos que esa sensación es parte de la experiencia, pero el estar acá y poder compartir con gente de Argentina, hace que podamos sentirnos como en casa y extrañar pasa a un segundo plano".

Para finalizar, Maxi destacó la hospitalidad que tienen los qataries con el pueblo argentino y sus aficionados "el fanatismo que tienen por la selección, y sobre todo por nuestro referente, Messi, hace que cuando ven a alguien con una camiseta de la selección, o identifican a un grupo de argentinos, nos ofrecen comida, bebida y regalos. Hace unos días, un jeque nos invitó a conocer un museo que tiene dedicado a Messi...parece una locura pero es real".